Uno ya tiene una edad y está acostumbrado a escuchar barbaridades de todos los tamaños en las campañas electorales. Lo que resulta nuevo y sorprendente es que estas barbaridades provengan de la Junta Electoral.
Es inadmisible que estos jueces puedan suspender derechos fundamentales en periodo electoral en virtud de no se sabe qué interés.
La junta electoral provincial de Toledo ha prohibido una manifestaciòn del colectivo Bolo Bolo para celebrar el Día Internacional contra la Homofobia con un argumento escalofriante: "[...] al existir partidos que siguen empleando la discriminación como tema electoral, una manifestación a favor de la igualdad sería partidista".
Por otro lado, la junta electoral de Madrid también ha prohibido la cocentraciòn en la Puerta del Sol con un argumento lamentable: "la petición del voto responsable, a la que hacen
referencia los convocantes, puede afectar a la campaña electoral y a la libertad del derecho de los ciudadanos al ejercicio del voto".
Tales argumentos descalifican a quien los utiliza y diría a estos jueces que los derechos constitucionales no quedan suspendidos en periodo electoral.
Todavía no lo han publicado. Me adelanto a la "jornada de reflexión".
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